jueves, 26 de enero de 2012

HIJUELA DEL JARDÍN BOTÁNICO DE LA OROTAVA. Tenerife.


Uno de los lugares que no puede dejar de visitar el viajero, es este jardín, remanso de paz en una ciudad llena de patrimonio.


“Tras el derribo del convento clariso de San José, en torno a 1868, el espacio ocupado por las huertas del mismo fue reconvertido en jardín-vivero del Jardín Botánico de La Orotava.
En 1888, se decidió eliminar el recinto, mientras en los inicios del S. XX le fue colocada una verja de forja de diseño ecléctico, de la que sobresale la puerta de acceso. Se trata de una labor de hierro en la que se reproducen formas vegetales en consonancia con el espacio en el que se ubica.”

En la composición de este jardín de unos 3400 metros cuadrados, podemos encontrar diversas especies. Entra las autóctonas de las islas destacan un madroño (Arbutus canariensis), un cedro canario (Juniperus cedrus) y un drago (Dracaena drago). No pasan desapercibidas otras especies alóctonas aclimatadas como la Erythrina rubrinervia. El colorido se ve acentuado con la floracion de las Hemerocallis spp., clivias (Clivia miniata) y aves del paraíso (Strelitzia reginae).

http://naturalezaymediorural.blogspot.com/2012/01/vanessa-vulcania.html
Otra nota de color viene aportada por las diferentes mariposas que son atraidas por las flores del jardín, como la maculada canaria, Vanessa vulcania y la mariposa monarca (Danaus plexippus). Entre las curiosidades podemos encontrar también una de las especies que dan alimento a la mariposa monarca como el Gomphocarpus fruticosus.

La Hijuela del Botánico fue creada en 1788 por iniciativa del VI Marqués de Villanueva del Prado, Alonso de Nava y Grimón, quien lo concibió como un centro complementario del Jardín de Aclimatación de la Orotava (hoy Jardín Botánico en el Puerto de la Cruz). En 1791, comienzan las obras del Jardín y se prorrogaron durante dos años. Y fue declarado Jardín Histórico el 29 de julio de 1994.

La Hijuela del Botánico se encuentra en la calle Tomás Pérez detrás del edificio del Ayuntamiento de La Orotava.

Este abre todos los días del año de nueve de la mañana a dos de la tarde y la entrada es gratuita. Desde este Blog, se recomienda que se estudie la posibilidad de que abra por las tardes, ya que es un elemento muy interesante para el visitante, del cual todos los tinerfeños están muy orgullosos.



Fuentes:



jueves, 19 de enero de 2012

ALBENTOSA-BARRIO DE LAS ESCALERUELAS. Teruel.

Fecha: 15-1-2012
Participantes: Silvia y Fernando
Distancia: 12,7 km. ida y vuelta
Tiempo: 3 horas 35 minutos.
Dificultad: Media sin dificultades técnicas
Acceso: Desde La Autovía Mudéjar A-23, tomamos la salida de Albentosa, y nos dirigimos por la A-1515, hasta la Estación de Rubielos de Mora, para luego acceder por la TE-V-6005 hasta la entrada del pueblo. También se puede acceder por la A-1514 que va hacia Manzanera.
Recorrido: Albentosa - Mirador-Puente sobre la Vía Verde - Mases de Albentosa - Viaducto Autovía - Las Escaleruelas - Viaducto Autovía - Mases de Albentosa - Puente sobre la Vía Verde - Mirador - Albentosa.
Recomendaciones: Llevar agua, calzado de montaña cómodo, protector solar y ropa de abrigo en invierno.

Esta ruta, transcurre por parte del sendero de pequeño recorrido PR-7, que a su vez une los de gran recorrido GR-10 y GR 8. 

Iniciamos el sendero en el municipio turolense de Albentosa. Este municipio está justo ubicado en la mitad de lo que fue la vía de Ojos Negros, que transportaba el mineral de hierro desde Ojos Negros hasta Los Altos Hornos del Mediterráneo, ubicados en el Puerto de Sagunto.


Cuando llegamos a los Mases del Albentosa, la senda transcurre en todo momento junto al curso de agua del Río Albentosa, hasta llegar al Caserío de Las Escaleruelas.

Comenzamos nuestra ruta en la población turolense de Albentosa, justo a la entrada del pueblo. En pocos metros tomamos un desvío a la izquierda, que nos lleva hasta un punto donde se ve el viaducto sobre el río Albentosa de la antigua vía de Ojos Negros-Sagunto. También desde el mismo punto se divisa la vía actual del ferrocarril Sagunto-Zaragoza.

Siguiendo las señales por un camino de tierra, dejando a nuestra derecha la vía Verde de Ojos Negros, llegamos hasta el trazado de la actual vía Sagunto Zaragoza. Tras pasar por un túnel, el camino nos lleva hasta un pequeño núcleo urbano conocido como Los Mases de Albentosa.

Tras pasar Los Mases, seguiremos la senda y pasaremos por uno de los ojos del puente de la carretera N-234. A partir de este punto la senda sigue junto al cauce del río Albentosa en su camino de descenso hacía el río Mijares. El río transcurre junto paredes de roca caliza de gran belleza.

Pasaremos por el Viaducto de la Autovía Mudéjar. No nos pasa inadvertida su grandiosidad, construido en hierro y hormigón armado.

Conforme avanzamos, el paisaje adquiere más belleza y el cauce se ve cada vez más encajonado. Llega un punto en el que hay que cruzar el río. En esta ocasión, poniendo unas piedras hemos podido cruzar dando unos saltos con el riesgo de mojarse los pies, porque la verdad es que en invierno no apetece mucho remojarse para cruzar el río.

En este tramo hay que estar atento a las señales, pues el sendero va en todo momento pegado a la margen izquierda en el sentido de la corriente. En algunos puntos hay que hacer alguna trepada y esquivar vegetación, pero sin grandes dificultades técnicas, salvo en un punto en que hay que cogerse como una lapa a la roca si no queremos mojarnos los pies.

Avanzando por la senda, veremos al fondo las edificaciones del caserío de Las Escaleruelas. Llegando, la senda asciende unos metros y nos hace pasar por entre los bloques de piedra de una antigua cantera abandonada en las inmediaciones del núcleo urbano.

El ferrocarril es un elemento muy asociado a este paisaje, ya que nos encontramos con la antigua Vía de Ojos Negros, transformada actualmente en vía verde. Por otra parte la línea de Sagunto-Zaragoza, vía por la cual vemos circular los pocos trenes que nos hacen ver que Teruel existe. Esperemos que no caiga en el olvido el ferrocarril para estas tierras.

El paisaje resulta curioso según los tramos, y nos encontramos con quejigos (Quercus faginea), carrascas (Quercus ilex), sabina albar (Juniperus thurifera), sabina negral (Juniperus phoenicea), chopos (Populus nigra), sauces (Salix sp)... 


domingo, 15 de enero de 2012

Vanessa vulcania.


Pertenece a la familia Nymphalidae. Se trata de una especie endémica de las islas Canarias y también de Madeira. Aunque está en las islas Canarias, no la encontramos en Lanzarote, y en Fuerteventura aparece ocasionalmente.

Con 54-60 mm de envergadura alar. El haz de alas anteriores es de color negro con zonas en rojo vivo y manchas en blanco hacia el extremo superior. El envés es similar y con una mancha azul al inicio de la zona roja.

El haz de las alas inferiores es de color marrón oscuro, con  el margen dentado y una zona roja junto al margen con manchas en negro. Al inicio del área roja hay dos pequeñas manchas de color azul. El envés es de color marrón oscuro y marmolado, con el borde gris.

Presente todo el año, considerando el periodo de vuelo como polivoltino.

Aunque la especie suele criar en las zonas de laurisilva, también se ve atraída por las flores de parques y jardines. Está presente entre el nivel del mar y los 1500 m de altitud.

Las larvas se alimentan de Urtica morifolia y Parietaria sp.

Fuentes:

-  Tolman, Tom & Lewington, Richard; 1997; “Guía de las Mariposas de España y Europa”; 1ª Ed. En castellano, 2002; Lynx Editions.


martes, 10 de enero de 2012

LISA DORADA. Chalcides viridanus.


Reptil de cuerpo esbelto y cilíndrico perteneciente a la familia Scindidae. Tiene sobre los 9 cm de longitud. Las patas son cortas. El dorso es de color pardo oliváceo a rojizo brillante. Los costados son negruzcos al igual que el vientre. Con puntos blancos, amarillentos o azulados en el dorso. Las hembras son más grandes y robustas que los machos.

Curiosamente, este ejemplar se localizó en una zona donde no es tan normal, debido a la altitud (2100 m). Es endémica de las islas de Tenerife, La Gomera y El Hierro. Entre sus amenazas están los predadores introducidos como ratas y gatos. Se suele alimentar de insectos y de arácnidos. La especie es ovovivípara. Es de hábitos diurnos.

Fuentes:




viernes, 6 de enero de 2012

VUELTA A LA MONTAÑA DEL CEDRO. Tenerife.


Fecha: 30-12-2011
Participantes: Elena, Silvia Jr., Susana, Cristina, Edgar, Ignacio, Erica, Fran, Silvia Sr. y Fernando
Distancia: 9,3 km.
Tiempo: 2 horas 40 minutos.
Dificultad: Media sin dificultades técnicas
Acceso: desde la Autovía del Norte, tomamos la carretera del Teide TF-21 a nivel de La Orotava, hasta llegar al cruce con la carretera de TF-38. También podemos acceder por la TF-24 si vamos por La Esperanza o bien por la misma TF-21 si venimos desde el sur de la isla. Parar poco antes del cruce con la carretera de Chio TF-38
Recorrido: Cruce carretera Boca Tauce - Pista de tierra - Torre vigía - Fuente del Cedro - Pista de Tierra - Cruce carretera Boca Tauce.
Recomendaciones: Llevar agua (No siempre hay agua en la fuente), gorra y protector solar. Llevar buen calzado de montaña y ropa de abrigo por si cambia el tiempo atmosférico repentinamente.

Desde la montaña del Cedro podemos tener una de las vista más bellas del Teide con el Pico Viejo, y sobre todo de las Narices del Teide, volcán que estuvo activo no hace tantos años.

La erupción de las Narices del Teide se remonta al año 1798 y estuvo unos tres meses expulsando materiales con gran actividad.

Comenzamos nuestra ruta junto a una zona de parking, donde también comienza el sendero PRTF-70. Nos introducimos por una senda acompañados por retamas (Spartocitysus supranobius), rosalillos de cumbre (Pterocephalus lasiospermus), alhelí del Teide (Erysimum scoparium), cabezotes (Cheirolophus teydis) y taginaste (Echium wildpretii), pero en esta época del año tenemos estas especies sin flor.

Tras atravesar este primer tramo, la senda atraviesa unas coladas de lava negras como el tizón. Se trata de la lava que fue expulsada por las laderas del Pico Viejo desde Las Narices del Teide. Son tan recientes que es imposible encontrar vegetación en ellas. Incluso el caminar resulta más pesado. Al atravesar estas coladas podemos descubrir la magnitud de dicha erupción.

A nuestra izquierda dejaremos grandes paredes de lava.  Una vez acabemos de atravesar las coladas nos encontramos con la misma vegetación que al inicio de la senda, hasta que llegamos a una pista de tierra. La seguiremos en sentido ascendente.
A partir de este momento, estamos rodeando la montaña del Cedro. Nos encontraremos con vegetación arbórea de pino canario (Pinus canariensis). Siguiendo la pista, llegaremos hasta una torre vigía. A partir de este punto la senda se hace estrecha y va ascendiendo rodeando la montaña.


También podremos ver algunos ejemplares de cedro canario (Juniperus cedrus), muy diferente de la imagen que tenemos creada de un cedro, ya que más bien se trata de un enebro endémico. Algunos ejemplares son muy antiguos, con ramas retorcidas e incluso algunas secas.

Siguiendo la senda llega un momento en que nos encontramos con una especie de cueva, se trata de la Fuente del Cedro. Aunque hay poca agua, si permanecemos en silencio de puede oír como caen las gotas de agua. Esta fuente está en una pared de roca.

Siguiendo  la senda llega el momento de descender hasta una pista de tierra, que nos acerca hasta el punto donde habíamos tomado la pista antes, cerrando así la vuelta a la Montaña del cedro.

En esta ocasión hemos tenido la suerte de ver un ejemplar de Lisa Dorada (Chalcides viridanus), reptil endémico de la isla.

Quiero dar las agracias a todos los senderistas que han compartido en esta ruta cada momento, incluyendo el buen humor que no debe faltar.



Fuentes:

lunes, 2 de enero de 2012

CIRCULAR LOS SILOS-TALAVERA-EL PALMAR. Tenerife.


Fecha: 27-12-2011
Participantes: Silvia y Fernando
Distancia: 13,5 km.
Tiempo: 3 horas
Dificultad: Media
Acceso: Desde la Autovía del Norte y luego Tf-5 hasta Icod de Los Vinos, tomando después la TF 42 hasta Los Silos. Si vamos por el Sur, desde la TF1, tomaremos la C-82 hasta Santiago del Teide para luego tomar la TF-436 hasta Buenavista del Norte y luego la TF 42 hasta los Silos.

Recorrido: Los Silos-Talavera-El Palmar-Los Silos
Recomendaciones: Llevar agua, gorra y protector solar. Llevar buen calzado de montaña.

Los Silos es uno de los puntos de partida más importantes de la isla para realizar senderismo. Los escarpados barrancos y una vegetación interesante, son atractivo suficiente como para dejarse llevar.

Esta ruta circula transcurre en su primer tramo por el sendero TF-55 que va de Los Silos al Palmar. El segundo tramo va por un camino empedrado que atraviesa varias veces la carretera y luego se toma un último tramo asfaltado para volver de nuevo a los Silos.

Comenzamos nuestra ruta en la plaza de Los Silos, donde hay un agradable jardín con un templete y una terraza donde compartir un té o café. Salimos hacia la carretera en dirección a Buena vista del Norte, y en pocos metros nos desviamos a la izquierda por un camino que tiene el indicador de Talavera.

Cuando acaba el camino, a nuestra derecha iniciamos una senda que nos lleva por una pendiente considerable. Pasaremos por una caseta que parece ser un antiguo depósito de agua. La senda asciende sin parar entre tabaibas (Euphorbia balsamifera y Euphorbia brousonetii) y cardones (Euphorbia canariensis).

Conforme ganamos altitud vemos la montaña fundida con el mar. Abajo va quedando el barranco de Blas, con un terreno muy escarpado.

El paisaje cambia y empezamos a ver algo de pinos procedentes de antiguas repoblaciones (Pinus radiata).

Al ganar altitud nos encontramos con una vegetación ya diferente, donde predominan los brezos (Erica arborea) combinados con especies de laurisilva.

Siguiendo la senda, llegaremos al punto más elevado de esta ruta, pasando por un pico de 785 m de altitud. A partir de aquí la senda desciende pasando por zonas de laurisilva.

En alguno de los tramos podemos encontrar la especie autóctona conocida como bicácaro (Canarina canariensis) y el alhelí del Teide (Erysimum bicolor)

Conforme descendemos, la vegetación vuelve a cambiar de nuevo, predominando tuneras (Opuntia Ficus-indica) y verodes (Aeonium sp.), hasta llegar a un camino de tierra que nos acerca hasta el barrio de los Canales, entrando ya en la población de El Palmar.


Tras atravesar El Palmar, tomamos un camino antiguo empedrado que atraviesa en ocasiones la carretera TF-142, y nos lleva cerca de Buenavista del Norte. Ya pisando el asfalto, vamos por carreteras poco transitadas para llegar de nuevo a Los Silos. También en esta zona veremos diversos ejemplares de palmera canaria (Phoenix canariensis)


En este tramo, nos acompañan diversos cultivos a los lados del camino en aquellas parcelas que no están abandonadas, como vid, calabazas y papas.

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